Los Warriors de Golden State volvieron a ganar en su patio y se colocan 2-0 arriba en la serie final que ahora se trasladará al Quicken Loans Arena de Cleveland.
“Los Guerreros” vencieron 122-103 a los Cavaliers de Cleveland.
Tres días después del primer encontronazo, Golden State Warriors y Cavaliers de Cleveland volvieron a activar las hostilidades de esta serie final de la NBA.
La ventaja parcial era para los de la bahía, quienes ganaron su primer duelo en tiempos extra y dejaron tendidos a unos Cavaliers que tenían que reaccionar en este segundo cotejo.
El inicio del primer cuarto fue totalmente para los Warriors. El equipo de Steve Kerr maniató a Cleveland en los primeros minutos y sorprendió a propios y extraños, pues su efectividad al aro era abrumadora.
Sin embargo, a pesar de no tener su mejor inicio de partido, los Cavs de Cleveland aún se mantenían en la pizarra. Su gran poderío ofensivo hizo gran parte de esa tarea, ya que en el tema defensivo dejaban mucho que desear.
Fueron precisamente esas desconcentraciones en la parte baja de la cancha lo que hicieron que los Warriors tomaran una ventaja de 32 a 28.
En los siguientes doce minutos Cleveland se desplomó. Lebron James estaba desaparecido y del otro lado, Stephen Curry, Klay Thompson y Kevin Durant mantenían y agrandaban la ventaja de su equipo.
La defensa de los Cavaliers seguía dando muchas facilidades y esto no era desaprovechado por los de Oakland, que al momento de desplazarse al tablero rival simplemente hacían lo que querían.
Stephen Curry ofreció un show aparte, sus disparos de tres enloquecieron en más de una ocasión a toda la fanaticada que se hizo presente en el Oracle Arena. Con 16 puntos a su nombre, la quinteta guerrera se iba al descanso con una victoria parcial de 59 a 46.
Ya en el tercer cuarto, el conjunto visitante mejoró notablemente y gracias a su efectividad a la ofensiva continuaban manteniendo “en la tablita” un juego que se tornaba cada vez mejor.
Uno de los jugadores más importantes de Cleveland fue Kevin Love, que era el socio perfecto del “Rey” Lebron, la esperanza de los de blanco y vino.
Sin embargo, la basta artillería de Golden State continuaba generando frutos y no soltarían la ventaja al menos en ese tercer cuarto que finalizó con 90 puntos a su favor y 80 permitidos.
Llegó el último episodio y los Golden State Warriors fueron simplemente el equipo que tiene acostumbrado a todo mundo. Stephen Curry hizo lo que quiso desde larga distancia y rompió el record de más triples en serie finales en la historia de la NBA, el registro era de nueve disparos logrados.
Con la victoria y la serie en la bolsa, Golden State ahora viajará a Ohio y se meterá al Quicken que seguramente estará abarrotado de aficionados a los Cavs haciéndose sentir en cada minuto del partido.
Foto cortesía: Golden State Warriors.
