El fabricante europeo de automóviles, Mercedes-Benz, ha anunciado que adoptará la tecnología de carga de Tesla. La compañía utilizará el Estándar de Carga de Norteamérica (NACS) en sus nuevos vehículos eléctricos de Norteamérica a partir de 2025. Los conductores tendrán acceso inicialmente a la red de Superchargers de Tesla a través de un adaptador CCS-a-NACS que estará disponible en 2024.
Según ha confirmado la compañía, esto no afectará los planes de Mercedes de desplegar su propia red de carga de alta velocidad a partir de este otoño. La compañía tiene previsto construir más de 400 “Hubs de Carga” en Norteamérica para 2030, con un total de 2,500 puntos de carga disponibles. Las primeras instalaciones incluirán conectores tanto CCS como NACS, y estarán abiertas a vehículos eléctricos de otras marcas.
Ventajas de la adopción del Estándar de Carga de Tesla: Mercedes mejora la experiencia de carga de sus vehículos eléctricos
Los ejecutivos de Mercedes han dejado claro que esta decisión busca ofrecer a los conductores una carga “rápida, conveniente y confiable” que mejore la experiencia general de los vehículos eléctricos, según afirmó Ola Källenius, presidente del consejo de administración de Mercedes.
El soporte para los Superchargers proporciona acceso a una mayor cantidad de puntos de carga (más de 12,000 Superchargers), lo que aumenta la confianza de los usuarios a la hora de adquirir modelos como el EQB o el EQS, sabiendo que podrán viajar largas distancias y minimizar los tiempos de carga.
Mercedes se convierte en el primer fabricante alemán en adoptar el estándar NACS, y se une a Volvo y a su marca hermana Polestar como los primeros fabricantes europeos en hacerlo. Volkswagen está considerando el cambio, pero hasta el momento no se ha comprometido por completo, aunque ya ha añadido conectores NACS a los cargadores de Electrify America.
En Estados Unidos, empresas como Ford, GM y Rivian han prometido su apoyo a la tecnología de Tesla. La asociación de movilidad SAE está produciendo una versión estandarizada del enchufe que podría ayudar a otros fabricantes a utilizar este formato.
Esta transición no es a nivel mundial y el enfoque de lujo de Mercedes limitará su alcance en comparación con marcas más asequibles como Ford y GM. Sin embargo, el cambio al estándar NACS aumenta la presión sobre VW y otros competidores que aún utilizan CCS en Norteamérica. Corren el riesgo de aferrarse a un enchufe para vehículos eléctricos menos común, lo que podría afectar los viajes de larga distancia y, por extensión, las ventas de automóviles.