(Canadá) – El gobierno canadiense ha sido claro con la administración estadounidense que dirige Donald Trump en referencia a la continuidad del TLCAN, y ha condicionado la compra de material de guerra estadounidense si el acuerdo comercial finaliza.
A través de medios canadienses se ha informado que, desde Ottawa se ha ordenado el cese o postergación de la compra de 18 aviones de combate estadounidenses de la firma Boeing, y es que, para el gobierno de Trudeau, mientras el rumbo a un nuevo Tratado de Libre comercio no esté del todo claro, no habrá intenciones de compra para este tipo de material de guerra.
Desde noviembre del año pasado, Canadá ha buscado reemplazar alrededor de 88 aviones de combate CF-18 (F/A-18 Hornet), como parte de sus obligaciones con la OTAN y Estados Unidos, principal aliado de la alianza en el continente.
Hasta hace unos meses, Justin Trudeau había autorizado la compra de 18 nuevos aviones F/A-18 Super Hornets para la Real Fuerza Aérea Canadiense, compra que se ha visto postergada, debido a las constantes amenazas del presidente Trump de finiquitar el TLCAN y de las muchas acusaciones de competencia desleal, que el mandatario estadounidense ha hecho a la compañía canadiense Bombardier, uno de los principales competidores de la firma Boeing en lo que respecta a la aviación comercial.
Donald Trump ha ido demasiado lejos en sus acusaciones y al grado de exigir se les impongan aranceles a los aviones canadienses de la firma Bombardier, situación que por supuesto a la administración del liberal Trudeau no ha tomado con mucho agrado.
A esta situación se ha unido la propia Boeing para exigir al gobierno estadounidense que se bloquee la venta e ingreso de aviones C-series, esto es debido que consideran que la compañía Bombardier recibe incentivos económicos del gobierno de Canadá, algo que impacta de forma directa en el precio de los aviones canadienses, haciendo que las compañías aéreas de los Estados Unidos elijan el producto de Bombardier y por encima del modelo local B-737 de Boeing.
La respuesta canadiense no se ha hecho esperar y ha detenido la compra de los F/A-18 Super Hornets hasta que el gobierno de Trump no de indicios de llevar un rumbo claro hacia la creación de un nuevo acuerdo y de olvidar las intenciones de poner aranceles a los aviones canadienses.
Con información de Notimex.