Corea del Norte informó que había realizado de forma «exitosa» un quinto ensayo nuclear, que Corea del Sur describió como la explosión más grande de este tipo llevada a cabo por Pyongyang.
La explosión habría provocado un movimiento en la tierra de Magnitud 5.3 en la zona. China y Rusia protestaron por la prueba realizada.
China instó a Corea del Norte a cumplir con sus obligaciones en favor de una península coreana sin armas atómicas y por la paz y la estabilidad en el noreste de Asia.
Pyongyang tiene que cumplir con las resoluciones de las Naciones Unidas y abandonar cualquier medida que empeore la situación, destacó el comunicado.
Obama fue informado de esta situación cuando se encontraba en vuelo rumbo a Estados Unidos procedente de un viaje por Asia a bordo del Air Force One, precisó Earnest.
El portavoz añadió que Obama, que llegó a Washington poco después de la medianoche local del jueves, mantuvo consultas con la presidenta surcoreana Park Geun-hye y con el Primer ministro de Japón Shinzo Abe, en llamadas telefónicas por separado realizadas desde el avión presidencial.
«El presidente reiteró el compromiso inquebrantable de Estados Unidos con la seguridad de nuestros aliados en Asia y en todo el mundo», dijo Earnest.