Los Sultanes de Monterrey revirtieron la serie y cosecharon su triunfo número 22 de la temporada, acercándose así peligrosamente a los primeros sitios de la Zona Norte.
Los dirigidos por Roberto Kelli se vieron abajo en la primera entrada, pero entradas más tarde la ventaja no se las quitaría nadie.
El encuentro comenzó con un primer capítulo de verdadera locura. Primero, Aguascalientes pegaba y hacia ver mal el pitcheo de Edgar González al conectar tres hits y dos carreras que figuraba mortificación en el rostro de la fanaticada.
Sin embargo, el primer turno al bat de Monterrey también fue fructífero; Félix Pérez se encargó de empatar el partido con un tempranero cuadrangular, mientras que Ramón Ríos y su doblete impulsó a dos compañeros más para irse arriba 4-2.
Luego de un explosivo arranque, las cosas se equilibraron y las respectivas defensivas lucían más sólidas.
Este último factor le ayudo más a los visitantes, quienes pegaron con un jonrón de Marc Flores y emparejaron los cartones en el Estadio de Beisbol Monterrey.
Los de la Sultana del Norte, al verse empatados, mejoraron su estándar de bateo y en el quinto rollo cosecharon dos carreras más, producto de un jonrón más, ahora de Agustín Murillo, que encendió de júbilo al estadio entero.
Dicha suma de carreras dejaron tocados a los aurinegros, quienes no encontraron la bola en las próximas entradas, donde lució de buena manera el pitcheo sultán.
Y para cerrar con broche de oro, el encargado fue Wirfin Obispo, que puso a temblar a la fanaticada con algunos batazos rivales, pero que al final de la noche solo significaron la victoria sultán.
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