En un dramático sexto juego, los Sultanes de Monterrey se impusieron seis carreras por cinco a los Toros, con lo que logran el campeonato de la Zona Norte.
El sexto juego de la Serie de Campeonato de la Zona Norte entre Sultanes de Monterrey y Toros de Tijuana llegó hasta el Palacio Sultán, en donde los locales buscaban definir su pase a la Gran Final de la LMB.
Apenas en su primera entrada, los Sultanes pegaron y lo hicieron fuerte gracias a un error del parador en corto tijuanense, José Chávez, quien no pudo concretar el doble play y permitió que Ramiro Peña llegara a la caja registradora para poner la carrera que inauguraba la pizarra. 
Los Toros nunca perdieron la paciencia y a pesar de verse maniatados con el pitcheo de Zack Dodson, respondieron en la tercera alta gracias a un tablazo de Roberto López, que hizo decirle adiós a la pelota y anotar un Home-Run en solitario que le permitió a Tijuana emparejar los cartones.
A partir de ese momento, Monterrey y Tijuana se vieron enfrascados en un gran duelo a la defensiva, en donde el primer error cometido podría ser contraproducente para cualquier conjunto.
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En el arranque de la quinta entrada, los Toros por fin le encontraron el modo al relevista Felipe González y volvieron a mover el score. Un doblete de Jorge Cantú hizo que Dustin Martin “volara” a home para darle la vuelta al marcador, dos carreras a una.
Parecía que se le venía la noche temprano a los Sultanes, sin embargo, la figura de Chris Roberson apareció en el momento ideal y con un cuadrangular en solitario volvió a emparejar los cartones, ahora a dos carreras.
La multitud enloqueció y los más de 22 mil aficionados que se dieron cita al Estadio de Béisbol Monterrey estaban que no cabían de la emoción.
El momento era sultán y conforme pasaban las carreras parecía que la cosa se inclinaría para los de casa, pero eso no sucedió.
En la inauguración de la séptima entrada, los Toros volvieron a dar una embestida que parecía mortal, ahora, el jardinero Corey Brown se despachaba con la cuchara grande al impactar un monumental Home-Run que trajo dos carreras totales para inclinar la balanza, 4-2 para los de la frontera.
Monterrey no bajó los brazos y en su oportunidad dentro de la fatídica séptima entrada le hicieron daño al serpentinero Jesús Pirela. Un batazo pegado a la línea del «Wolverine» Álvarez trajo a casa a Leo Germán, quien recortaba distancias y colocaba el marcador 4-3, todavía en favor de los de rojo.
Inmediatamente después, Ramón Ríos conectó otro solido tablazo para que Ramiro Peña caminara al plato y definiera el empate a cuatro. La comunidad sultán se volvió loca de emoción y el partido todavía estaba en la tablita.
El partido estaba de toma y daca, Toros de Tijuana no se daba por vencido y otro sólido contacto les daría la carrera del desempate. Cyle Hanked fue el que puso orden y movió el score una vez más, ahora 5-4 favor a los fronterizos.
Cuando todo parecía perdido, el conjunto de Roberto Kelly sacó la casta vía Leo Germán, quien con un dramático Home-Run trajo dos carreras más para mover el marcador a su favor. En la pantalla gigante se divisaba el dramático 6-5 que le daba la ventaja a los regios.
En la última oportunidad para los Toros, el señor Wirfin Obispo se encargó de cerrar el partido, para darle así el título de la Zona Norte a los Sultanes de Monterrey.
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