Los Toros de Tijuana derrotan en 5 juegos a los Pericos de Puebla para agenciarse su primer gallardete.
Hay nuevo campeón en el béisbol mexicano, Toros de Tijuana y su potente ofensiva aplasta por pizarra de 15-3 a los Pericos de Puebla, logrando su primer campeonato de la Liga Mexicana de Béisbol.
Aunque el partido parecía tomar un rumbo distinto. Apenas en el primer episodio, Jesús Arredondo conectó un sencillo al jardín izquierdo para impulsar a Julio Borbón, abriendo el marcador.
En la tercera entrada la ofensiva fronteriza explotó, Roberto López, en sacrificio, produjo el empate en los spikes de Isaac Rodríguez, luego, de caballito entraba José Guadalupe Chávez, colocando arriba a los astados.
Enseguida Dustin Martin conectaría un grand slam por todo el jardín central, llenando de confianza y alegría al dogout visitante.
La ofensiva taurina no paró de fabricar carreras, en el cuarto rollo, López volvería a producir de sacrificio, entrando al home Alex Liddi.
Josh Roenicke sentenciaría su salida del duelo tras imparable de Corey Brown que timbró una rayita más para Tijuana.
Ángel Rodríguez sería el nuevo lanzador; teniendo a Brown en primera, Cyle Hankerd pegó bambinazo al prado derecho para aumentar el marcador a 10-1.
En el quinto inning, otro cuadrangular para los astados sentenciaría el rumbo del encuentro. El italiano, Liddi, envió la pelota al fondo del jardín izquierdo para el 11-1.
Los emplumados tratarían de morir en la raya, Alberto Carreón pegó profundo tablazo a la izquierda del campo para sumar una carrera más a la causa local.
Hankerd aparecía de nuevo en la octava, otro jonrón remolcando a Brown para el 13-2 en el electrónico. Cerrando la entrada, César Tapia conectó sencillo para enviar al plato a Arredondo y poner el 13-3.
Por si no fuera poco, en la parte alta de la novena, Brown pegó tablazo para poner las cifras finales en el marcador, 15-3 a favor de los bureles y la obtención de su primer título.
Miguel Peña lanzó por espacio de 5 entradas y 2 tercios, recibió solamente una carrera y 5 imparables, ponchando a 4 rivales para lograr el triunfo más importante de la temporada.
Por otro lado Josh Roenicke fue el perdedor tras laborar en 3 entradas y 2 tercios, 8 imparables y 9 carreras, y ponchando a 2 oponentes.