El atacante colombiano regresó al conjunto felino luego de estar un año por tierras poblanas, declarando el amor que tiene por su actual equipo con una peculiar comparación.
Su regreso al campamento felino llenó de ilusión a Julián Quiñones, ex atacante de Lobos BUAP, quien regresa después de un préstamo. En un proceso de adaptación que vivió el cafetalero lo hizo ganar amor por los universitarios, por lo que habló de su cariño a la institución.
Posterior a la práctica matutina de la escuadra regia, Quiñones atendió a los medios hablando sobre su regreso. A lo que se expresó contento y convencido de que el plantel lo recibirá con una cálida bienvenida.
«Siempre he sido bienvenido aquí, ya conocía a muchos de mis compañeros, me siento como en casa. Siempre he estado cómodo acá, sé que soy bienvenido siempre y cuando está a disposición del cuerpo técnico», comentó el atacante felino.
Así mismo, el cuestionamiento de si estaba en su cabeza volver a vestir la casaca auriazul, el delantero utilizo una peculiar comparación. Al usar como ejemplo una novia, expresando su amor por el equipo, ante diversas indirectas a Tigres en su paso con Lobos.
«La verdad es como si tienes una novia, de la noche a la mañana no las vas a a olvidar porque todavía la sigues queriendo, la sigues amando. Así pasa con este club que me abrió las puertas, siempre pienso en él», agregó Quiñones.
Con su regreso, la competencia se eleva en la delantera universitaria, puesto que son diversos nombres los que pelean por un lugar en el cuadro titular. Estar a lado de grandes figuras del balompié mexicano motiva al colombiano.
«Me motiva, porque si me trajeron es porque estoy haciendo las cosas bien, estoy en buen nivel. Acá están los mejores y siempre lo han demostrado dentro de la cancha», afirmó Julián ante los medios de comunicación.
La pretemporada continua para los felinos antes de encarar su primer encuentro de preparación. Este 22 de junio se enfrentan a los Correcaminos en un duelo a puerta cerrada, donde Quiñones podría estrenarse con los norteños.