Fratelli d’Italia rumbo a la Final de la Euro

Superados en el fútbol hoy, la Azurra se valió de mente fría y su corazón caliente para eliminar a España.

“Siam pronti alla morte (Estamos listos para morir)”, recita una de los versos del himno italiano, ese que con fervor musita el once inicial de Roberto Mancini y toda la Selección.

Esa que fue superada a lo largo de los 120 minutos entre tiempo regular y extra por una excelsa España. Luis Enrique, el capitán del barco ibérico que se aferró a sus convicciones y elecciones, encontró en el circuito Busquets-Pedri-Dani Olmo una vía para pulverizar las espaldas de Jorginho.

Con el hombre del RB Leipzig detectando las áreas donde aparecer a la espalda del hombre del Chelsea y desquiciando a Chiellini y Bonucci por no poder saltar sobre él, el equipo del asturiano gozó de múltiples ocasiones de abrir el marcador, sin suerte.

Entonces, lo que tanto careció Federico Chiesa para explotar en velocidad, apareció. Donnarumma descolgó el balón, cedió rápido a Verratti, Insigne recibió del hombre del PSG y de tres dedos, filtró hacia el movimiento donde Chiesa recortó en el área y a lo Arjen Robben, venció a Unai Simón.

Con todo al frente, el destino decidió darle una oportunidad al criticado Álvaro Morata, quien tras un apoyo por el elevado Dani Olmo, definió ante Gigi.

Sin más, los tiempos extra siguieron con la tensión, misma que rompió el capitán Chiellini rompió con empujones, cachetada y puñetazo incluido a Jordi Alba en el volado para decidir orden y lugar para las penas máximas.

Y si, Italia estaba dispuesta a morir como lo dice su canto, pero no quería y no quisieron. Sin contar a Locatelli, Jorginho recompuso su desquiciante partido y con álgido aire de superioridad, sentenció de un brinco a una ‘Furia Roja’ dolida y decepcionada.

Así, juntos, avanzó Italia. Como hermanos, marcharán nuevamente a la catedral del fútbol esperando a la casera talentosa de Inglaterra o a la mágica Dinamarca, por lo pronto, L’Italia s’è desta (Italia ha despertado).

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